Han pasado diez años desde el final de Bakumatsu, una era de guerra que vio el levantamiento de los ciudadanos contra el shogunato Tokugawa. Los revolucionarios querían crear una época de paz y un país próspero libre de opresión. Ha llegado la nueva era de Meiji, pero aún no se ha logrado la paz. Las espadas están prohibidas, pero la gente sigue siendo asesinada en las calles. Los huérfanos de los veteranos de guerra no tienen adónde ir, mientras que el gobierno parece contentarse con llenarse los bolsillos con dinero.